sábado, enero 28, 2006

Buenos Momentos

Más espacio reciclado. Este fragmento formó parte de la sección de cine de la revista Metropolis Buenos Aires de enero.

¿Y de que está hecho el cine si no es de esos grandes momentos que quedan flotando en el inconsciente colectivo? Frases sublimes, escenas impresionantes que comentamos y revisamos cada vez que participamos de la ceremonia cinematográfica semanal. Aquí va la grilla caprichosa de las momentos cinéfilos que más nos gustaron en el 2005 que se acaba de terminar.

El violento plano único de con Oh Dae-su aniquilando, martillo en mano, a cientos de contrincantes en la excepcional Old Boy.

El surrealista río plateado infectado de cadáveres en La Guerra de los Mundos.

La cena hogareña en Tiempo de Valientes, con el magnífico policía Luis Luque, interrogando a la esposa de su analista.

MIckey Rourke como el incombustible Marv de Sin City

Los diálogos filosos de Clint Eastwood en Million Dollar Baby

La melancolía del personaje de Paul Giamatti (¡nuestro actor favorito!) en Entre Copas (Sideways).

El karaoke kitsch de “O quizás simplemente le regale una rosa” en Whisky

Los cruces verbales entre Bill Murray y Jeff Goldblum en Vida Acuática (The Life Aquatic with Steve Zissou)

Las actuaciones de Imelda Staunton y Maggie Cheung en Vera Drake y Clean respectivamente.

El final, con homenajes varios a la historia del cine, de Wallace and Gromit

La última secuencia, con alto contenido lisérgico, de La película de Bob Esponja, con ¡David Hasselhoff! partiendo al rescate.

La contemplación del asalto a una fábrica por parte del personaje sombrío de Ricardo Darín en El Aura.

miércoles, enero 25, 2006

In Memoriam

un grande



Chris Penn: 1965-2006

Thank You, Nice Guy Eddie. We'll miss you...

miércoles, enero 18, 2006

Hay quienes se toman vacaciones y hay quienes huyen maldiciendo la ciudad, con promesas de cambio de vida y aislamiento absoluto durante quince o veinte días, a la espera ansiosa de un retorno en cero para enfrentar la vorágine diaria. Para esos ermitaños de temporada, que más allá de protestas catódicas no dejarían su hogar sin la laptop bajo el brazo, una lista de peliculillas para acentuar esa sensación, momentánea y juguetona, de paranoica soledad. No: no vamos a recomendar El Resplandor.

Duro de Matar (Die Hard, John McTiernan, 1988) Considerada, hoy, una de las mejores películas de acción de la historia inauguró un subgénero: la aventura claustrofóbica, el héroe encerrado en un mismo espacio con los villanos. Una película imposible de dejar de ver y rever mil veces.

Rashômon (Akira Kurosawa, 1950) Oscar a la mejor película extranjera y desembarco definitivo del cine Nipón en Hollywood, esta obra maestra muestra a tres hombres de distinta clase social, mientras se refugian de la lluvia en un templo abandonado y analizan un asesinato desde diferentes puntos de vista. Con la ventaja de la buena edición en dvd, conviene tener siempre presente esta perla cinematográfica.

Doble de cuerpo (Body Double, Brian De Palma, 1984) El director recurre a su pasión Hitchcockiana para contar un thriller con un protagonista claustrofóbico que se convierte en testigo de un asesinato a partir de su placer voyuerista.

La Comunidad (Álex de la Iglesia, 2000) En su recorrida por todos los géneros, el talentoso director español realizó su mejor film a partir de una historia de suspenso. Millones de pesetas, un descubrimiento fortuito y una Carmen Maura increíble, atrapada en un edificio de vecinos tan delirantes como peligrosos.

La Conversación (The Conversation, Francis Ford Coppola, 1974) Después del primer Padrino, Coppola realizó este film mucho menos ambicioso pero de increíble intensidad, donde narra las angustias paranoicas de un espía vigilado. Casi todo rodado en el mismo escenario y con una actuación magistral de Gene Hackman.

Tarde de Perros (Dog Day Afternoon, Sidney Lumet, 1975) Un robo a un banco que tenía que durar 10 minutos, se convirtió en un show mediático entre los asaltantes, la policía y un grupo de vecinos curiosos. Lumet mantiene una tensa calma durante dos horas en una película que, de movida, ya tiene un final anunciado.

Ascensor hacia el cadalso (Ascenseur pour l’échafaud, Louis Malle, 1958) Una joya del cine negro francés que cuenta la historia de una pareja de amantes que planea el asesinato de un esposo lejano y poderoso. El crimen perfecto se frustra cuando, una vez cometido el acto, el asesino queda atrapado en el ascensor que da título al film. Por si fuera poco, la trompeta suave de Miles Davis recorre toda la película, en una de sus pocas, pero gloriosas, colaboraciones con el cine.

Alien (Ridley Scott, 1960) Para algunos una película de ciencia ficción y para otros de terror. Lo cierto es que fuera de los rótulos, este film claustrofóbico marcó varios hitos: una heroína nada convencional, una de las escenas más revulsivas jamás filmada y el monstruo más amado de la historia del cine.

(Nota publicada en la revista Metropolis Buenos Aires - Enero/Febrero 2006)

lunes, enero 16, 2006

Buen descenso

mujeres al borde de un ataque de nervios

Como para confirmar los laureles recibidos con Dog Soldiers, el británico Neil Marshall se despachó este año pasado con su segundo largometraje como director. The Descent, a grosso modo, aborda el mismo tópico que el flojo film “La Cueva”, pero con óptimos resultados.
Con esta producción, ya se pueden observar alguna que otra línea narrativa del director. Al igual que en su película anterior, elije llevar un grupo humano a vivir situaciones extremas solo que, en este caso, el grupo está formado en su totalidad por mujeres. Con un teaser fuerte, Marshall se encarga de poner en caja los diferentes perfiles de las protagonistas y justifica las decisiones que tomarán durante el avance del film. Se nota un mayor presupuesto en la producción respecto de Dog Soldiers, y un oscurecimiento en la forma de abordar el género. Vale la pena agenciarse una copia de esta peli y reconocer, lamentablemente, que varios de las más interesantes realizaciones del nuevo cine de género no llegan, ni siquiera, a editarse en video. Bendito seas download.

jueves, enero 12, 2006

El balance en el comienzo

El post que abre el año y el periodo de trabajo es, arbitrariamente, un balance de compulsa cinéfila de diciembre pasado. Me parece que, en respeto al tiempo y trabajo que se tomaron en participar, bien vale hacer una ponderación de resultados. Obvio, por ser una “encuesta” excesivamente abierta, las conclusiones con bastante generales.

Sin lugar a dudas, la gran ganadora fue Sideways, por la cantidad de votos generales que sumó y por la buena ubicación en la grilla de los mismos. Casi todos la ubicaron entre las tres mejores películas del año. También fue Miles (Paul Giamatti) el personaje más nombrado y las líneas de diálogo de ese film las más recordadas, seguidas de las de Life Aquatic.
Para seguir con constantes, Batman Begins fue recordada también por todos los votantes, con un rango de orden entre el tercer y décimo puesto. Lo mismo pasó con El Aura, lejos la ganadora nacional, seguida por Tiempo de Valientes. Sin City tuvo un ranking desparejo, pero fue muy mencionada y tanto Wallace and Gromit como El Cadáver de la Novia obtuvieron sus dividendos como las animaciones preferidas.
Para finalizar, Old Boy cosechó escasos votos, pero fue la película que tuvo más menciones en el primer lugar.

Grazie!


¡Salud, buen año!